Una mujer en EE.UU. se desmaya al ver el aspecto de su bebé recién nacido. El momento del parto, las emociones y el aspecto de los bebés recién nacidos pueden provocar una sensación en la madre que las lleve al desmayo, o lo que es pero, al rechazo de su propio hijo.
Tener un bebé supone importantes cambios hormonales, sensaciones no experimentadas hasta el momento y un verdadero shock al ver por primera vez a tu bebé recién nacido. Seguro que al ver a un recién nacido alguna vez has pensado «uahh que feo» al ver su cabecita deforme, sus ojos hinchados o un color de piel un tanto extraterrestre.
La imagen habitual de un bebé es tierna, con una fina piel blanca, regordito y muy limpio, pero en verdad cuando terminan su intensa pelea por salir de la barriga de mamá, acaban como en un combate de lucha libre, perecen demacrados y su aspecto provoca más de un rechazo, aunque por suerte se pasa pronto. Se trata de las marcas provocadas por el momento del nacimiento
Cómo son los bebes recién nacidos
Que los bebés son muy feos al nacer ya lo había escuchado, pero vivirlo en mis propias carnes supuso un momento entre pánico y amor incondicional muy extraño. Afortunadamente su aspecto mejoró mucho en los siguientes días.
Orejas plegadas o de soplillo*, cabeza apepinada, ojos hinchados, marcas en su piel de aspecto raro y color de piel azulado, vientre abultado, genitales hinchados, esos son los rasgos más característicos de los bebes recién nacidos. Un aspecto que sorprende a muchas personas, que cuando van a visitar a mamá a maternidad, esperan encontrar un angelito limpio y bello.
En tan solo 2 semanas tu bebé tendrá el aspecto de un sol naciente, de una estrella en el firmamento o de lindo conejito blanco, elije tu el motivo, pero seguro que nada tiene que ver con su aspecto inicial. La verdad es que a las visitas para conocer al bebé deberían de ser a partir del primer mes, y no nada más dar a luz, ya que así no solo conocerían a un bebé más radiante, sino que además dejarían descansar a mamá tan solo unas horas después del parto.
Todos los bebes recién nacidos presentan esos signos provocados por los esfuerzos del bebé en el momento del nacimiento en mayor o menor medida, pero ¿A que ahora no lo cambiáis por nada del mundo? Feliz maternidad.
*Un truco para las orejas dobladas es pegarselas con cinta a la cabeza para que vayan al sitio y no cojan forma de soplillo.
Imagen: http://www.labebeteca.com/